3 de marzo de 2009

FIN DE AÑO

Por Dayami de las mercedes. Año 2007.
Desde que comienzan los aires otoñales y el invierno dejo de ser yo para ser del viento. Intento vivir con los vivos y dejar en paz a mis seres queridos que descansan (por lo menos eso espero) en la verdadera casa de Dios . Juro que cada año lo intento.
Como soy del viento no sé cuál es la verdadera realidad, la que soñé cuando añoraba una familia, la que vivo con mis amigos o la tristeza de saber que todo va pasando.Me niego a creer que todo sea tan gris. Me niego a creer que tengo tanto y se me va de las manos.
                                    AÑO 2016.
  A menudo debo tocarme para saber que soy de carne, porque los pensamientos, las fuerzas y el corazón se me van tan adentro que sólo veo el cielo, no siento la tierra y creo que no soy real.  Dios día a día me da fuerzas para soñar, para sentir una enorme fe en el amor. Y tengo tanta felicidad acumulada que puedo compartirla en este nuevo año. Y deseo que sientas, que siempre en el Señor, se puede empezar.
* La foto inicial pertenece a la colección de postales antiguas publicadas en el blog http://ninona.wordpress.com/2007/12/21/ano-nuevo-ii/ y así utilizada solo con fines periodísticos.

2 comentarios:

miguel dijo...

me sorprende cuánto significan los amigos en tu vida, cuánto ánimo te dan.

flores amarillas. dijo...

de hecho sin mis amigos,Miguel, no sería quien soy ante tantas pérdidas en mi vida, sobre todo de personas tan imprescindibles como para sentirte lo más importante del mundo. gracias a mis amigos y por supùesto mi hijo y esposo, no estaría viva. Créeme. Espero seamos muy buenos amigos.